La UCR se mantiene vigilante contra el Aedes aegypti aun en época seca
Por: Nidia Burgos Quirós / 0 comentarios / 17 noviembre 2021
Foto: Karla Richmond-Archivo ODI
A través de 66 comités en todo el país y el apoyo del laboratorio de Microbiología, la Universidad de Costa Rica (UCR) se mantiene, durante todo el año, vigilante ante la presencia de criaderos de Aedes aegypti, que puedan ocasionar enfermedades como el dengue, el Zika y la chikungunya.
Para estos efectos se cuenta con el Sistema de Registro sobre el Control de los Criaderos del Aedes aegypti (SIRCRIA), donde se hacen los reportes de hallazgos en las diferentes visitas que se realizan a las instalaciones de cada unidad y también con el apoyo de la Sección de Servicios Generales (OSG), que colabora en la eliminación de factores que pudieran producir criaderos en el futuro.
Gracias a este control que se realiza a través de los comités de las diferentes unidades de la Institución, el presente año solo se reporta un caso de presencia de Aedes aegypti en una de las instalaciones, el cual fue atendido y no se reportan personas afectadas por alguna de las enfermedades que produce este mosquito, en parte porque ha habido poca presencia en la Institución, a raíz de la pandemia por la Covid 19.
Por ello, en la Comisión Institucional para el Control del Aedes aegypti (CIAD), en diversas ocasiones se ha hecho la instancia a los diferentes comités para que estén atentos a la revisión de sus instalaciones para detectar posibles criaderos o factores que pudieran favorecer la presencia de este mosquito.
Si bien la época de invierno es la que se ha considerado más riesgosa para la presencia del mosquito, también se hace el llamado para tener cuidado en la época seca, ya que en algunos sectores del país sube la temperatura, lo cual prefieren estas especies y también si algunas personas guardan agua en contenedores, deben verificar que estos no se conviertan en criaderos, así como al regar las plantas o tener platitos para macetas.
Vigilancia constante
La pandemia por la Covid 19 generó que la mayoría de personal de la UCR asumiera trabajo remoto, como la modalidad laboral, lo que ocasionó que durante algunas semanas o meses no se hicieran las revisiones correspondientes, por parte de los diferentes comités, pero tampoco había personal docente o administrativo que se pudiera ver afectado.
Sin embargo, con el regreso paulatino a la presencialidad, diferentes comités han retomado las revisiones respectivas en sus instalaciones, como es el caso de la representante de la Escuela de Educación Física (EDUFI), Pamela Salazar Cruz, quien según comentó, a pesar de la poca afluencia de estudiantes en el primer semestre se hiceron algunas revisiones, pero ya en el segundo semestre las ha ampliado.
En este caso, la EDUFI se encuentra ubicada en Finca 3, Instalaciones deportivas, cuya administración está a cargo de la Oficina de Bienestar y Salud (OBS), no obstante, la revisión que se realiza es en el entorno en la parte externa, visitando la edificación principal, los gimnasios, las salas de pesas, el jardín interno, platos de macetas y otras áreas internas.
Por su parte, Karla Rivera Shedden, quien representa al comité por la Facultad de Ciencias Sociales, ubicada en la Finca 2, Ciudad de la Investigación, comentó que las revisiones también las está retomando, ya que anteriormente no había estudiantes ni personal docente o administrativo en el edificio.
Según comentó, la revisión que realiza, con el apoyo del personal de limpieza, es en la parte externa de todo el inmueble, así como en el parqueo que se ubica en frente y en la parte interna de las oficinas, donde verifica temas como que a los floreros se les cambie el agua frecuentemente.
Durante sus revisiones detectó que en algunas partes se empozaba el agua y entonces hizo el reporte a la Sección de Mantenimiento, lo cual fue atendido.
Tanto Salazar como Cruz consideran que este tipo de revisiones son muy importantes en la detección de criaderos de Aedes aegypti.
“Me parece súper bueno, porque es como un refuerzo a las labores que todo el mundo está haciendo”, manifestó Salazar en el sentido de que, si cada comité realiza la labor de verificar que no haya criaderos o factores que podrían producirlos, se cubren las diferentes zonas de la Universidad.
Y agregó que el objetivo común es justamente minimizar el impacto en su área de trabajo directamente y también en la población que está cercana a la Universidad, para que tampoco se vea afectada.
“Bueno, ahora estamos con el boom del Covid, pero el Aedes aegyptic produce enfermedades y por las informaciones y las charlas que he recibido, no es algo que hay que tomar a la ligera”, destaca Rivera por su parte.
Y agregó que, aunque no se conoce que alguien se haya enfermado en la Facultad de Ciencias Sociales por este mosquito, siempre hay que tener cuidado.
Atención de reportes
En la Facultad de Microbiología, se encuentra el Laboratorio de Entomología Médica, el cual brinda apoyo a la CIAD y a la Universidad en el análisis de las pruebas que envían los comités y se les brinda el resultado del análisis a través del SIRCRIA, según comentó Adriana Troyo Rodríguez, coordinadora de dicho laboratorio.
“Las personas que encuentran criaderos entonces nos pueden enviar larvas y cuando a veces tienen problemas con mosquitos adultos también, muchas veces les pedimos que si pueden recolectarlos y mandarnos para poder ver qué son. Entonces, lo que hacemos es hacer una identificación y revisar inicialmente; lo más importante es ver si son Aedes aegypti o Aedes albopictus, que son los vectores de los virus de dengue, Zika y chikungunya y descartamos que sean o no sean”, explicó Troyo.
Y aunque no fueran de esas especies tratan de hacer la identificación para ver cuál sería la mejor forma de tratar de prevenirlos o controlarlos.
Cuando existe presunción de que haya algún criadero, lo que recomienda Troyo es que se envíen las larvas vivas o muertas al laboratorio, pero que no se encuentren deterioradas. Para su recolección se puede utilizar un colador o un contenedor plástico. También se pueden recolectar los mosquitos vivos en una bolsita e igual enviarlos para su análisis.
En caso de que se requieran unos días para ir a dejar las muestras se recomienda poner las larvas en alcohol o etanol de al menos 60% o incluso refrigerarlas.
El presente año 2021, se presentaron seis reportes de comités por sospecha de criaderos, pero solo uno de ellos resultó positivo por Aedes aegipti dentro de las instalaciones universitarias, comentó Troyo.
Por otra parte, la especialista en entomología médica informó que aún en época seca podría haber otros tipos de criaderos en contenedores que las mismas personas llenan de agua como macetas o platos de macetas, dado que en esta época se da más el riego.
También, se da el caso de lugares donde hay desabastecimiento de agua y entonces las personas guardan este líquido, lo que podría generar criaderos y mosquitos.
“Entonces, esos son los criaderos en los que nosotros mismos nos tenemos que enfocar, que son los que están siendo utilizados las mismas personas que facilitan que se llenen de agua, en la época seca son los más importantes”, expresó Troyo.
Por ello, a pesar de que ya no haya lluvia en los próximos meses, el llamado en el verano es a tener cuidado con el riego de plantas y el llenado de contenedores de agua para diversos fines.
Para mayor información sobre el Aedes aegytpi puede visitar el sitio: https://www.ucr.ac.cr/mosquito-aedes.html
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