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Plan de repoblamiento forestal transformará el campus en un espacio más diverso y seguro

Por: Katzy O'neal Coto / 0 comentarios / 10 diciembre 2025

Durante el 2025, un centenar de árboles de especies nativas fueron plantados en la UCR en sustitución de los pinos y eucaliptos que, por décadas, dominaron las zonas verdes de la Ciudad Universitaria. Los nuevos árboles ofrecerán importantes servicios ecosistémicos en los próximos años, como la protección de los suelos, la captura de carbono y el hábitat para especies de aves, mamíferos y roedores, así como mayor seguridad dentro del campus.

La Comisión Foresta Universitaria (CFU) seleccionó cuidadosamente los árboles a sembrar por sus características adecuadas a la zona altitudinal, a las necesidades de la población universitaria y del ecosistema. Estos se cultivaron en el vivero institucional ubicado en Santa Ana, para garantizar que fueran ejemplares saludables capaces de resistir el proceso de adaptación.

“Para este proceso de repoblamiento escogimos especies que fueran nativas y también que nos brindaran más servicios ecosistémicos que los árboles que teníamos anteriormente. Nuestro objetivo con todos estos procesos de repoblamiento forestal es crear un campus más diverso y seguro”, acotó el Ing. Héctor Espinoza, regente forestal de la UCR y encargado del vivero institucional.

Para sembrar estos árboles, se realizaron tres campañas durante la época lluviosa, en los meses de junio, agosto y setiembre, con el apoyo de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) y el Programa de Voluntariado. Las siembras se programaron en ese periodo debido a que las condiciones de humedad y temperatura son favorables para el crecimiento inicial.

Con la llegada de la transición de la época lluviosa a la seca, los nuevos árboles entran en una etapa de adaptación en la que aprenderán a resistir la sequía, fortalecer su estructura y conservar la vida que la lluvia les brindó. Su crecimiento variará de acuerdo con la especie.

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Ecología, estética y funcionalidad

Los expertos de la CFU seleccionaron especies nativas para este plan de repoblamiento, entre las que se encuentran especies conocidas como el cortés amarillo y el cortés negro, cuyas flores amarillas y púrpura, respectivamente, embellecerán en el futuro espacios como el bulevar de la Facultad de Derecho, manteniendo alturas menores a los 25 metros.

El trabajo de la CFU y del vivero institucional también permitirá conservar en el campus especies poco comunes, como el roble encino o el guayacán real, que se encuentra en peligro de extinción. También es importante señalar que, aunque la mayoría de los árboles que se sembraron este año pertenecen a especies nativas, hay algunos pocos que son de especies exóticas (vainillo, níspero japonés, jacaranda, capulín y sena).

“Esto refleja la política de la CFU de priorizar la siembra de especies nativas, sin prohibir del todo la siembra de especies exóticas para fines didácticos (cursos de Biología) y estéticos”, anotó el biólogo especialista en botánica, Dr. Mario Blanco Coto, miembro de la CFU.

Por su parte, el biólogo Dr. Mauricio Fernández Otárola, director de la Red de Áreas Protegidas de la UCR y miembro de la Comisión, amplió sobre la labor que realiza este grupo de personas expertas, que a lo largo del año valoran siembras y cortas para lograr un equilibrio tanto ecológico como estético y funcional en los territorios de la UCR.

“La CFU es la encargada de velar por la cobertura forestal en el campus central y en las diferentes sedes y recintos de universidad, eso implica recomendar qué se siembra, dónde se siembra, qué se corta y qué se poda, atendemos ese tipo de consultas y velamos porque el campus se mantenga con una cobertura forestal abundante, que sea un pulmón verde en los lugares donde se encuentre, que brinde servicios a los ecosistemas pero también un servicio estético, que haya especies nativas hermosas que traigan un bien a la población universitaria en su sentimiento al estar dentro de los campus”, comentó Fernández.

Intervenciones forestales con sentido

Paralelamente, durante el 2025, la CFU atendió múltiples solicitudes de instancias y personas de la comunidad universitaria para la valoración de árboles con riesgo. Los tres criterios básicos que aplicaron en sus análisis son: estado del árbol, especie y ubicación. En cada caso se realizó una visita al sitio por parte de los miembros, se analizó en reunión y se emitió una recomendación.

En algunos casos, la comisión recomendó la corta de otros árboles tanto en la Sede Rodrigo Facio como en sedes y recintos regionales, principalmente por motivos de seguridad. Por ejemplo, en el Jardín José María Orozco se taló un Pino y un Eucalipto, ambos eran especies exóticas que medían alrededor de 40 metros de altura y que representaban un riesgo para las personas visitantes.

Otros espacios como la zona verde contigua a la Facultad de Microbiología debieron intervenirse para cortar un conjunto de árboles de Eucalipto que también ponían en peligro la integridad de los transeúntes por su gran tamaño y fragilidad.

Así mismo, cepas de bambú de gran tamaño y peso también deberán removerse de las márgenes de la Quebrada los Negritos antes de finalizar el año. Esto por recomendación de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) debido a que, al desprenderse, el bambú contribuye a la obstrucción del cauce y a las inundaciones que afectaran a la UCR y comunidades aledaña.

La Comisión Foresta Universitaria tiene el compromiso de mantener y mejorar las áreas verdes de la Institución con el fin de promover un ambiente agradable, sano y propicio para el desarrollo de las actividades universitarias en todas sus manifestaciones. Por esta razón, siempre que sea necesario talar un árbol, éste será sustituido por otras especies de árboles, arbustos y plantas que contribuyan al equilibrio ecológico del campus.

Especies plantadas en el 2025

Árboles nativos de Costa Rica